29 de octubre: planta cara al ictus

Publicado el: 29/10/2018
Día Mundial ictus

El 29 de octubre se celebra el Día Mundial del ictus, enfermedad que ocurre cuando se ve afectada la llegada de sangre al cerebro, provocando un daño neuronal que deja graves secuelas físicas y cognitivas en la persona que lo sufre. El propósito del día de hoy es mejorar la prevención de la enfermedad, que se ha convertido en la tercera causa de muerte en el mundo occidental.

Al ictus también se le conoce como Accidente Cerebro Vascular (ACV), embolia o trombosis. La enfermedad afecta a una de cada seis personas en el mundo, más de 17 millones de personas al año, de las cuales, 6 millones fallecen.

Según datos del Grupo de Estudio de Enfermedades Cerebrovasculares (GEECV) de la Sociedad Española de Neurología (SEN), en España el ictus afecta cada año alrededor de 120.000 personas, siendo la primera causa de muerte en mujeres, la segunda en hombres y la principal causa de discapacidad en adultos. En Europa mueren 650.000 anualmente por esta causa y, de ellos, 40.000 son españoles.

Esta enfermedad es más frecuente a partir de los 55 años y su riesgo aumenta proporcionalmente con la edad. Así, se estima que más del 21% de la población mayor de 60 años de nuestro país, casi dos millones de personas, presenta un alto riesgo de sufrir un ictus en los próximos 10 años, según los datos del estudio PREV-ICTUS. La Organización Mundial de la Salud (OMS) va más allá en sus previsiones: según sus estimaciones y teniendo en cuenta que en el año 2050 la población mayor de 65 años representará el 46% del total, casi la mitad podría sufrir un accidente cerebrovascular.

Los factores de riesgo que hay que tener en cuenta para prevenir la enfermedad son la hipertensión, el colesterol elevado, la falta de actividad física, la obesidad, el tabaco, el alcohol y enfermedades como la diabetes. Así, algunas de las medidas para evitar la enfermedad son la disminución del consumo de sal y grasas junto con una dieta variada y sana, hace ejercicio, no fumar y reducir el consumo de alcohol y controlar el peso, la tensión, la ingesta de azúcar y cuidar nuestro nivel de colesterol.

Cuáles son los síntomas para detectarlo

En la mayoría de los casos, quien sufre un ictus pierde una parte de su autonomía en un grado menor o mayor. Los principales síntomas para detectar un ictus son los siguientes:

  • Pérdida de la sensibilidad: es una de las señales más comunes. Normalmente, sucede en uno de los dos lados de la cara y suele acompañarse de otras molestias, como una sensación repentina de hormigueo en el rostro, el brazo o la pierna del lado afectado.
  • Dificultad para expresarse: la falta de flujo sanguíneo puede ocasionar dificultades a la hora de articular palabras, lo que provoca problemas a la hora de expresarse.
  • Falta de fuerza y sensibilidad: normalmente afecta a uno de los lados del cuerpo, concretamente en los brazos y en las piernas.
  • Alteración de la visión: otro de los síntomas del ictus es la pérdida parcial o total de la visión durante unos momentos.
  • Dolor de cabeza repentino: la falta de sangre y oxígeno en el cerebro puede derivar en dolores de cabeza repentinos.
  • Desequilibrio y mareo: dificultades para caminar, mareos… también pueden ser indicios de una posible embolia.
  • Problemas de oído, olfato, gusto: el ictus también puede provocar que otros sentidos como el olfato, el gusto o el oído queden temporalmente afectados.
  • Pérdida de la memoria: se trata de una pérdida repentina de memoria, acompañada de una sensación de gran confusión.