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Asegura tu negocio y tus trabajadores

Temas: Empresas
Publicado el: 25/09/2018
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Un negocio es el resultado de una gran apuesta personal y familiar. Al inicio, la principal preocupación es conseguir clientes, facturar y cobrar.

Poco a poco, los esfuerzos se dirigen a mantener estos clientes que han confiado en nuestro proyecto y que nos pueden dar la estabilidad que nos permita planificar el futuro con tranquilidad.

Como vemos, todo gira en torno a la gestión de los ingresos, que son la esencia del negocio y lo que nos va a permitir hacer frente a nuestras obligaciones económicas.

Sin embargo, no tenemos en cuenta los riesgos inesperados que pueden afectar a nuestro proyecto y que podemos cubrir con pólizas de seguro. De hecho, asegurar nuestro negocio es mucho más importante de lo que podríamos pensar.

¿Cómo asegurar un negocio?

Como hemos visto, los negocios están expuestos a riesgos. Por ello, es recomendable contratar algún tipo de cobertura contra posibles accidentes o amenazas, que dependen del sector o del tipo de negocio, internacional o no.

Existen 2 tipos de seguros, los obligatorios y los voluntarios.

Seguros obligatorios

Hay sectores en que la contratación del seguro es obligatoria. En los que es voluntaria, es aconsejable su contratación ya que las consecuencias, tanto civiles como penales, pueden ser más graves que el coste para la empresa de la cuota anual.

  • Seguro de convenio. El convenio colectivo establece la obligación de contratar un seguro de accidente laboral y fija las coberturas e indemnizaciones. Su coste depende del número de empleados y de la actividad de la empresa.
  • Responsabilidad civil. Determinadas profesiones y actividades, como médicos o abogados, tienen la obligación de contratar un seguro de Responsabilidad Civil, que responde a las posibles reclamaciones por vía civil a las que se está expuesto.
  • Sector de la construcción. Seguro decenal Seguro que responde a la garantía de 10 años que hay que ofrecer a los compradores de inmuebles nuevos. Cubre daños, defectos o vicios.
  • Seguros de vehículos. En el caso que la empresa tenga en propiedad vehículos particulares o industriales.

No son obligatorios, pero pueden ser convenientes

  • Seguro multiriesgo. Es útil para cubrir los daños que pueda sufrir u ocasionar el lugar en que se encuentre la empresa.
  • Seguro de responsabilidad civil. Aunque no es obligado, da cobertura a varias incidencias:
    • Responsabilidad civil patronal, cubre las relaciones entre empresa y trabajadores.
    • Responsabilidad civil de productos, cubre los daños que puede ocasionar el producto entregado a su destinatario.
    • Responsabilidad civil de explotación, cubre la actividad empresarial.
  • Seguro de responsabilidad medioambiental. Responde a imprevistos que pongan en peligro la viabilidad de la empresa frente a riesgos medioambientales.

¿Cómo reducir los costes asociados a los seguros?

Si queremos cubrir varios tipos de riesgo con diferentes seguros, multiriesgo, responsabilidad civil…. negociar la cartera con la misma compañía permite obtener una reducción de las cuotas. Otra opción, es contratar los seguros con el banco con el que habitualmente se trabaja.

Hay que pensar evitar cubrir 2 veces el mismo riesgo con diferentes seguros. Por ejemplo, si tenemos un local comercial dentro de un edificio, el continente de nuestro negocio ya está cubierto por el seguro del edificio. Si lo incluimos en la póliza de nuestro seguro multiriesgo lo estamos cubriendo otra vez, aunque sólo tengamos el derecho a cobrar una vez en caso de siniestro.

Una buena negociación de los seguros y su adecuada planificación puede suponer un ahorro de hasta un 40% de su coste.

Asegurar al trabajador 

Las cuotas a la seguridad social es uno de los principales costes que la empresa tiene que afrontar para cubrir el riesgo de accidente y enfermedad de sus trabajadores.

Los trabajadores por cuenta ajena, los asalariados, están inscritos obligatoriamente en el Régimen General que, en España, agrupa a la inmensa mayoría de trabajadores.

¿Cuánto es el coste de la Seguridad Social para cada trabajador?

Para calcular el importe a pagar a la Seguridad Social por cada trabajador, se considera su base de cotización mensual, que se calcula sumando todas las retribuciones salariales cotizables de los distintos convenios colectivos. Hay que tener en cuenta que la base de cotización está acotada con un mínimo y un máximo, dado que también se utilizan para el cálculo de prestaciones.

El coste de la seguridad social para la empresa se encuentra entre el 32% y el 38% de la base de cotización, ya que depende del trabajo que desempeña. Para realizar un cálculo aproximado podemos considerar que un tercio de la base de cotización es el coste de seguridad social.

Supongamos un trabajador que tiene un salario bruto de 1.500 € al mes con las pagas extras prorrateadas, y una base de cotización de 1.450 €. El coste de la seguridad social para la empresa asciende a 483,33 € y el coste final 1.983 € al mes.

Asegurar un trabajador no es una cuestión sólo de costes

Las investigaciones han demostrado que las iniciativas en el lugar de trabajo pueden contribuir a reducir el absentismo por enfermedad en un 27% y los costos de atención sanitaria para las empresas en un 26%.

Por otro lado, un negocio es un grupo humano, por lo que su estado emocional es muy importante. Si en la empresa existe un ambiente de trabajo en que predomine el miedo a tener un accidente, una lesión o una enfermedad, con una alta probabilidad la productividad se verá afectada.

Si los empleados perciben que están protegidos ante cualquier imprevisto, trabajarán más eficientemente, con lo que la productividad será elevada.

La prevención de riesgos laborales debe tenerse en cuenta en la propia estrategia de la empresa, ya que no puede ser considerada una actividad o función más.

Es de gran importancia, pues tiene un impacto positivo en la seguridad y en el estado psicológico y emocional de cada trabajador.

Una buena política de Prevención se basa en:

  • Una evaluación de riesgos de cada puesto de trabajo que pondrá de relieve los riesgos.
  • Un plan de actuación para eliminarlos o reducirlos al mínimo.
  • Una política de vigilancia de la salud que con reconocimientos médicos personalizados hará un control de la salud del trabajador en función de los riesgos a los que está expuesto.